Tuesday, December 28, 2010

Casamientos en India

Finalmente llegó el día del casamiento. O quizás debería decir los casamientos: ¿cuántos? Cuatro en total, pero ya dejé de contar la cantidad de eventos a los que asistí relacionados con las bodas. Voy a tratar de hacer un resumen lo más abarcativo y descriptivo que sea posible sin que sea tedioso o extenso para su lectura.

El día del casamiento de Asif comenzó bastante atareado. Costumbre extraña del lugar (e incomprensible para mí por lo menos): los familiares o amigos que vienen de otros lugares desayunan, almuerzan y cenan en la casa de los organizadores de la fiesta. Se podrán imaginar cómo estaba la familia de mi amigo con todos los preparativos y además con gente a comer a toda hora en la casa. Pero así es, la familia anfitriona se tiene que ocupar de cuidar de sus huéspedes de la mejor manera posible, o sea, con comida. Pero eso no es todo. Había, por ejemplo, tíos lejanos que venían para desayunar y después se quedaban sentados en una silla sin decir una palabra (a nadie) hasta la hora de almorzar, después salían un rato y volvían para tomar el té. Me pregunto, si ya están invitados a la fiesta y les han alquilado un departamento para que duerman, ¿no se pueden ocupar de sus comidas aunque sea el día de la fiesta? Respuesta: inaceptable. Sería una ofensa para los anfitriones enterarse que uno de sus invitados va a buscar comida a otro lugar. Es más, la mamá de Asif mandaba comida a todos los departamentos donde estaban los familiares que no iban al de ella para comer. Como si organizar una boda fuera poca cosa, hay que agregar menú diario para todos los que puedan llegar a venir.

Llegada la tarde todos comenzamos a cambiarnos. Yo iba a usar un traje oscuro pero para mi sorpresa, la familia me había preparado un traje típico para la ocasión un Sherwani. Éste es como una túnica, en mi caso de color beige, con piedras bordadas en los costados, los hombros y la espalda. Se completa con una especie de pañuelo en el cuello y unos pantalones enormes donde yo podría entrar unas 3 o 4 veces. Una vez completo el vestuario, nos fuimos al lugar donde se realizaría el evento. El papá de Asif contrató un colectivo para transportar a los familiares, y el resto de nosotros fuimos en varios autos. Llegamos todos y nos pusimos en la entrada para esperar la llegada del novio. Y finalmente apareció Asif, montado en un caballo, con un sobrino y acompañado de un séquito de personas que se encargaban de llevarle una sombrilla, de hacer avanzar el caballo y de evitar que Asif se cayera.



Así avanzó hasta la entrada donde todos esperaban. Se bajó del caballo y ahí toda la familia (incluido yo, como comenté en una entrada anterior del blog) comenzamos a avanzar juntos hacia el escenario. Un detalle: los hombres de la familia de la novia nos entregaron una rosa a cada uno al entrar para darnos la bienvenida.



¿Por qué los hombres? Porque en el lugar de la fiesta había dos escenarios, uno para el novio y otro para la novia. Entonces, varones por un lado y mujeres por el otro. (A esto lo decide cada familia. En otra de las fiestas a la que fui más adelante, había un solo escenario.) En el escenario había un sillón que parecía un trono de un rey, y mi amigo estaba vestido para hacer honor a este lugar, y un par de sofás a los costados. A ambos costados del pasillo que conducía al escenario se encontraban innumerables filas de sillones y sillas también. Subimos y Asif se sentó en su trono y los "hermanos" (Kashif, hermano real, y yo) nos sentamos en los sillones de los costados. De ahí en más comenzó un rito un tanto aburrido pero por tratarse de mi primera boda india muy interesante. La gente que comenzaba a llegar se sentaba en las sillas que se encontraban delante del escenario y cada tanto subían para saludar al novio y charlar un rato. Esto debe haber durado unas tres horas. Y en todo ese tiempo mi amigo no se movió de su lugar. Mientras, los padres de Asif y de la futura esposa hacían sociales con los invitados que iban llegando.








Por supuesto estuvimos muy bien atendidos. Permanentemente nos dieron jugos y bocaditos de todo tipo: pollo con salsas picantes, albondiguitas vegetarianas, empanaditas, etc). Mientras, en el predio, la gente se iba sentando en las mesas para la cena. Pero no todos comen al mismo tiempo. Solamente hay algunas mesas, entonces uno cena cuando quiere y con la gente que quiere. Los familiares esperan hasta el final de la fiesta para cenar con los recién casados, que solamente en ese momento se juntan. La novia, igual que el novio, está sentada en un trono en un escenario y tiene que saludar a todos los invitados que suben a saludarla.

Una nota pintoresca: en el casamiento de la hermana de Asif, el novio tardó en llegar porque estaba en un embottellamiento, sin embargo, esto no impidió que los invitados que ya estaban en el predio comenzaran con su cena. Es más, vi gente que se fue de la fiesta antes de que el novio y su familia llegaran. Como dije antes, parece que la comida es la parte principal de cada festejo que se hace en esta región.

Después de todos los saludos de rigor, llega el momento esperado, el "sí" del novio. Pero no ocurre de la manera que yo me lo esperaba. Llegó el sacerdote (no sé cómo se llama entre entre los musulmanes, pero lo llamaré sacerdote por cuestiones de practicidad). Éste leyó unos escritos, después le hizo firmar a Asif unos papeles y finalmente se pusieron a rezar. Así es, incluso la parte en la que se le pregunta a los novios si aceptan a la otra persona como esposa, ocurre por separado. Primero se le pregunta a la mujer, se firman los papeles y después el sacerdote va con el novio y le hace la misma pregunta. Ahora sí, ya están casados (aunque en escenarios separados).







Después de finalizado este acto, todos los invitados comenzaron a retirarse y los mosos prepararon una mesa larga para que las dos familias pudieran cenar. Solamente en ese momento se sentó mi amigo junto a su esposa y ni siquiera ahí intercambiaron una palabra. Saqué unas fotos para ilustrar el momento, pero no pude hacer que la novia, ahora esposa de mi amigo, mirara a la cámara.

Fue durante la cena que tuve acceso a la parte de las mujeres y ahí pude ver bien a la novia. El vestido que llevaba puesto era indescriptible, por eso adjunto fotos. Un lujo al que no estaba acostumbrado. Toda vestida de rojo con pulseras, collares, aros y otras joyas en la frente de oro y plata. Si mi amigo parecía un rey, entonces la novia era una reina con todas las letras: impresionante.



Durante la cena uno se siente un poco incómodo porque todo el tiempo tiene a un mozo parado detrás de su silla atento a cualquier movimiento y cualquier pedido que uno quiera hacer. Y uno se siente peor aún cuando va a dejar la mesa porque estos mismo mozos piden propinas a todos, e insisten bastante. Yo me salvé por ser extranjero y no hablar el idioma, pero mis amigos tuvieron que sacar la billetera y darles unas rupias. Y una vez que todos se levantaron de sus sillas, todos los mozos se sentaron en la mesa y se pusieron a comer todos los restos. Parece que es normal porque ocurrió en los cuatro casamientos a los que fui, pero choca un poco.

Detalles más, detalles menos, las cuatro bodas fueron parecidas, aunque en lugares distintos. En un predio abierto las dos primeras, con comida internacional en la tercera, la cuarta en un hotel cinco estrellas. Fueron cuatro porque se casó primero Asif, a los dos días su hermana, al día siguiente el hermano del esposo de la hermana de Asif y la cuarta fiesta fue organizado por estos dos hermanos para todos sus amigos. No quiero pensar el dinero que deben haber gastado, pero debe haber sido muchísimo. Con sólo recordar que a la madre de Asif le robaron la cartera el primer día y adentro tenía algo así como 5.000 dólares por si hacía falta para algo uno se puede hacer una idea de que todo debe haber salido un ojo de la cara.

Entre las bodas, o a veces al mediodía del mismo día de alguna de las bodas, hubo almuerzos organizados por las distintas familias para las familias políticas y familiares y amigos venidos desde otros lados. Así fue como el 22 se casó Asif, el 23 vino a almorzar la familia de su esposa, el 24 fuimos a almorzar a lo del novio de la hermana de Asif, el 24 a la noche fue su casamiento, el 25 la fiesta organizada por la familia de la novia del hermano del esposo de la hermana de Asif, el 26 la fiesta de los dos hermanos en el hotel 5 estrellas... y cuando uno piensa que eso es suficiente... todavía hay más.

El 23 a la noche vino la familia política de la hermana de Asif con unos papeles que corroboraban que la novia había aceptado casarse sin presión alguna, y lo mismo el novio. Obviamente, esto se hace con cena de por medio y té con masitas después de que todo ha salido bien... ¿Más?

Sí, porque los familiares todavía están. Entonces por ejemplo el 27, a las 10 de la mañana llegó gente a desayunar. Después, la familia de mi amigo invitó a almorzar al esposo de su hermana, hoy 28 a la mañana vinieron unos tíos a desayunar también antes de tomar el vuelo a su casa y esta noche hay una cena para despedir a la familia de la esposa de Asif que se vuelve a Arabia... MUchísimo, ¿No? Y muy difícil de poner en palabras de manera que no sea cansador para todos los lectores del blog.

Eso es todo por ahora. Espero que les haya gustado. como siempre, si hay preguntas, me las hacen, y ya la próxima vez vendré con datos pintorescos de los lugares que vaya visitando, porque a decir verdad, todavía no he visto mucho de la ciudad debido a todos estos eventos.

Gracias por leer, y hasta pronto.

Mightydem







Wednesday, December 22, 2010

Preparándose para el casamiento

Sigo con las crónicas de India. Ya hace casi una semana que estoy por acá y no dejo de asombrarme. Hay tantas cosas para contar que no sé por dónde empezar. A ver, bueno, ya que estamos cerca del casamiento de mi amigo Asif, voy a empezar por ahí.

Llegó finalmente el día en el que hubo que saludar a la novia y a su familia. Llegaron todos el sábado bien temprano a la mañana y mi amigo ya desde el día anterior estaba que no podía dormir. Y con razón: después de unos cinco años sin verla y de casi no tener contacto con ella, de golpe tiene que casarse. Encima ya con toda la familia venida desde Arabia Saudita, ya no hay lugar para echarse atrás. Un sentimiento extraño el de Asif: por un lado dice que tiene muchísimas ganas de comenzar esta nueva etapa en su vida, pero por otro lado está muy abrumado. Después de vivir más de cuatro años en Londres, se tiene que acostumbrar nuevamente a la vida en Mumbai y encima se tiene que casar. El problema es que la familia de la novia no quería posponer el casamiento mucho tiempo más. Si él decidía permanecer soltero un año más, entonces a ella le buscaban otro esposo. Otro detalle, la hermana menor de mi amigo se casa también dentro de pocos días, y según Asif, queda mal si una hermana menor se casa antes que un hermano mayor... costumbres, supongo, pero lo cierto es que Asif se vio medio presionado (¿u obligado?) a casarse y formar una familia.

Hablando de familia, mi amigo se va a casar con la prima hermana. Así es; la madre de Asif tiene dos hermanos. Una de las hijas de uno de los hermanos va a ser la futura esposa de mi amigo. Otro detalle a tener en cuenta: la hermana mayor de Asif está casada con un hijo del otro hermano de la madre. La respuesta que me han dado a mi pregunta, "¿por qué se casan entre primos?" es que de esa forma conservan el estatus social. La familia es de clase social alta entre los musulmanes tanto de India como de Arabia, por lo que para conservar el nivel, se casan entre parientes.

Bueno, vuelvo al momento en que tuvimos que conocer a la novia y a su familia. Aclaro que tengo el privilegio de que Asif me considera su mejor amigo extranjero, digamos como su hermano, lo mismo la familia, que me dice que soy un hijo más, así que tengo acceso a todos estos eventos que al ser tan diferentes de lo que estoy acostumbrado, los hacen únicos. Llegamos al departamento donde estaba toda la familia de la novia y al instante me sentaron en una silla y me dieron una taza de té. En ese momento tuve un déjà vu de las primeras veces que salíamos con chicas cuando íba al secundario. En esos momentos, las chicas se sentaban y charlaban entre ellas y los chicos también, y a veces cuando uno trataba de iniciar una conversación, se producían unos silencios producto de la "inexperiencia" o la falta de interés, o cualquier otra razón. Los silencios, cuando uno se encuentra en un grupo de personas, pueden llegar a ser molestos y hasta tensos. La misma sensación me produjo este momento. Nadie hablaba. Las mujeres (la mamá de la novia, la novia y sus hermanas) estaban todas sentadas en un sofá, todas cubiertas con sus burkas (la ropa típica de las musulmanas, de color negro y que no permiten que se vea el rostro) y el padre de la novia, el padre del novio, su hermano, el novio y yo estábamos enfrente, sentados y sin que nadie dijera nada. Yo pensé que Asif iba a ponerse a hablar con su futuro suegro, o que los dos padres dirían algo, pero no. Así que bueno, como yo era el extranjero, el padre de la novia (tío del novio) me preguntó algo y ahí nomás nos pusimos a hablar del vuelo, de los preparativos para la fiesta, y de otros temas irrelevantes. Después de un ratito, terminamos el té y nos fuimos. Al instante mi amigo me agradeció que me hubiera puesto a hablar con el suegro porque él estaba bloqueado y no sabía qué decir. ¿Raro no? Especialmente si se tiene en cuenta que el suegro es el tío de uno. Pero bueno, así son las costumbres y hay que respetarlas.

Después del encuentro, nos fuimos a buscar el traje de Asif. Fuimos al centro de la ciudad y nos metimos con el auto en unas callecitas angostas y repletas de personas. No sé cómo hacen para manejar en estos lugares, pero para la gente acá es natural. Creo que le encontré sentido a la frase "fila india". En realidad no sé si tiene mucho que ver, o quizás sí: la gente no camina por las veredas si no que lo hace por la calle. No es que no haya veredas, pero simplemente no se usan. Como todos caminan por la calle y además éstas son angostas la situación se complica un poco. Los bocinazos están por todos lados todo el tiempo y hay que tener un poco de cuidado con los camiones, autos, motos y, a veces, animales, que aparecen de los lugares menos previstos. Por eso la gente camina por los costados en fila (india) y quizás ahí esté el origen de la frase.

Bueno, fuimos a buscar el traje hecho a medida por un sastre especializado en ropa para casamientos. Asif se lo probó y mi primera impresión fue: "parece un rey, un rajá, emperador etc." El traje es de color rojo con piedras bordadas y está acompañado por un sombrero (llamado safa) y unos zapatos que parecen sacados de las 1000 y una noches. Todos los miembros de la familia (incluido yo) nos vamos a poner trajes tradicionales, o por lo menos así me dijeron. Todavía no vi el mío, será una sorpresa seguramente.



Otro evento al que asistí con Kashif (hermano de Asif) y sus dos hermanas es Haldi Mehendi. Se trata de una ceremonia en la que la familia del novio le da a la novia y a su familia regalos. Cuando llegamos al departamento donde está alojada la novia y su familia dispusimos los vestidos, joyas, dulces y demás regalos, que estaban todos envueltos en papel de celofán de distintos colores, en el suelo. Asif no pudo venir porque tiene prohibido ver a la novia antes de la boda. Lamentablemente, de este evento solamente tengo fotos de los regalos y del suegro y de los hermanos de Asif. Como yo vengo invitado por el lado de la familia del novio y además soy hombre, entonces no puedo sacar fotos de la novia ni de sus hermanas. Una lástima porque este es el momento en el que se pintan sus manos con esos diseños que parecen flores entrelazadas. Igual creo que tengo una oportunidad más cuando sea el Handi Mehendi de la hermana de Asif. Así que una vez que comimos unos dulces (hay unos cubiertos con polvo de plata, sí sí sí, plata como la de las pulseras y anillos, así que quizás sea una inversión comer estos bombones) nos fuimos así la novia podía ir a la habitación donde estaban los regalos y abrirlos.



Estaba por publicar esta entrada pero ya que estuve hablando del Haldi Mehendi y de cómo me quedé con las ganas de ver qué pasaba, finalmente tuve revancha. Como se casa la hermana de Asif también, tenía que venir la familia del novio a traer los regalos y hacer la reunión de chicas que desribí más arriba. Pero ahora pude ver qué pasa con el novio. Vienen principalmente todas las mujeres de la familia (tías, abuelas, primas, y las hermanas de la futura esposa y la suegra también), toman un poco de una pasta de color amarillo que se encuentra en un plato cubierta de pétalos de rosa (si a uno no le dicen que es pintura, está condenado a morir intoxicado porque realmente parece una tarta) y la ponen en la cara del novio. Todos hacen lo mismo. Después toman unos billetes o monedas y los pasan por la cabeza del novio haciendo círculos. Esa plata se entrega después a mendigos y parece que le trae salud al futuro esposo.





Una vez que todos le pusieron la pasta amarilla a Asif, se empezó a descontrolar todo y todos los varones ligamos un poco de pasta amarilla. Dicen que el que sigue al novio en el orden en el que le pusieron la pasta es el que se casa después... ¿y a quién agarraron segundo? Por supuesto, al extranjero que estaba sacando fotos... Si se cumple el pronóstico... mmmm no sé, habrá que esperar un tiempo y ver si es verdad, jaja.



Un detalle más que quiero agregar y que me pareció muy pintoresco. Las chicas se hacen unos diseños en las manos y antebrazos (mehendi) que parecen flores y hojas entrelazadas, un diseño muy asiático diría, difícil de describir, por eso adjunto fotos. Lo hacen con una pintura especias que queda en relieve. Después de un par de horas se raspa este relieve y la piel queda como tatuada con estos diseños. Es un trabajo que lleva muchas horas y dura un par de días solamente, así que hay que aprovechar el momento para sacar fotos porque después se hace imposible.





Nada más por el momento. La próxima vez, será seguramente con los cuentos del casamiento. Mientras, creo que escribí material suficiente para entretenerlos un buen rato.

Gracias por leer.

Mightydem

Friday, December 17, 2010

Primera impresión de India - Mumbai

Finalmente y después de un vuelo desde Alemania que incluyó una escala en Dubai, llegué a Mumbai. Ya de entrada hubo indicios de lo que me esperaría más adelante: se había acabado el orden alemán y me iba a tener que armar de un poco de paciencia para adaptarme a la falta de orden (¿desorden quizás?) de India.. En el aeropuerto tuve que esperar un poco más de una hora hasta que finalmente vi mi valija aparecer en la cinta de equipaje. En la salida del aeropuerto me estaban esperando Asif y su hermano Kashif, quienes se alegraron muchísimo de verme. Ahí nomás me sacaron mi mochila y mi valija y se pusieron a cargarlas ellos y ya en auto emprendimos el regreso a casa.

Andar en auto es una experiencia única por acá... ¿qué el tráfico en Argentina es alocado? ¿que en Estambul la gente maneja por donde quiere? Eso no es nada comparado con lo que vi acá... Ni bien uno sale a la calle, las bocinas se escuchan por todos lados y hay obstáculos de todo tipo que bloquean el camino: animales, personas, vendedores, motos, ómnibus, taxis, mototaxis (three-wheelers). Los carriles prácticamente no existen (lo mismo que los semáforos) así que todos avanzan por donde pueden y si uno maneja con un poco de precaución, no va a ningún lado. Los autos se paran con espacios de no más de 10 centímetros unos de otros y las motos pasan casi rozando por la derecha y por la izquierda (cruzar una calle también es una aventura, porque bueno, uno no sabe de dónde puede salir el próximo auto o moto).



Una vez en casa la familia me recibió con muchísima alegría. Me tratan como si fuera un hijo más y ya apenas me lavé la cara me sentaron en una mesa y me pusieron en frente de no sé cuántos platos de comida típica (y bastante picante por cierto) y no paraban de insistir hasta que probé cada uno de ellos. Pollo con chutney, pollo al curry, cordero con yogur, salsa de vegetales (daal), arroz basmati, todo riquísimo. Me pusieron cubiertos pero uno trata siempre de hacer lo que hacen los locales, así que decidí ensuciarme un poco y comer con la mano (derecha) como hacen acá. En realidad para comer, uno toma un pedazo de roti (una especie de tortilla) y con eso unta las salsas o agarra los pedazos de pollo, pero si en vez de roti hay arroz, entonces se come con la mano directamente. Con los dedos se hacen montañitas con el arroz hasta que queden bien compactas y ahí se lo unta en las salsas y se lo pone uno en la boca. Tardé un poquito en acostumbrarme, pero por supuesto, todos quedaron contentísimos cuando me vieron que no usaba los cubiertos.



Se viene el casamiento de mi amigo así que todos están con los preparativos. La mamá de Asif y sus dos hermanas se han pasado días enteros armando bolsas con vestidos y joyas dentro para que la gente que viene de otros lados no tenga que traer sus cosas. Entonces, cada unos de los invitados más cercanos recibe un paquete con la ropa y las joyas que tiene que usar (todavía no vi de qué se trata, pero por lo que me dijeron hay pulseras y aros de oro, aparte de saris todos bordados especialemnte para la ocasión).

Mientras las mujeres se dedican a esto, los hombres se la pasan discutiendo sobre el menú y el lugar de la fiesta y demás cuestiones. Parece que a este casamiento van a asistir unas mil personas, así que hay mucho para organizar. Para mí, mil es un número enorme, pero acá dicen que es un casamiento normal. Por ejemplo, Asif dice que un par de semanas atrás asistió a un casamiento donde hubo más de tres mil personas, una locura de gente pero que parece que acá es moneda corriente. El menú va a consistir en distintos platos vegetarianos y de carne (pollo y cordero porque la vaca y el cerdo están prohibidos acá), diversos jugos (nada de alcohol) y helados y dulces varios. Como nadie confirma si va a ir o no a la fiesta, los preparativos se hacen según el total de invitaciones enviadas, así que si falta mucha gente, no sé qué harán con tanta comida que va a sobrar, supongo que se donará o algo así... tengo que investigar al respecto.

Ayer fuimos a ver el lugar donde se va a hacer la fiesta. Es un lugar abierto, enorme, donde se pone un techo de tela (todo armado con soportes de caña) y donde se van a instalar dos escenarios: uno para la novia y otro para el novio. Parece que durante la mayor parte de la fiesta (de siete de la tarde hasta medianoche) el novio está solo en su escenario y la novia sola en el suyo y ambos tienen que saludar a todos los visitantes que van llegando. A las doce, se hace una cena entre los familiares, y ahí sí, se juntan los novios en la misma mesa. Voy a tener la suerte de estar en la mesa de la familia, todo un honor para mí, así que supongo que podré ver todo bien de cerca. Aparte de los escenarios, en todo el lugar va a haber sillones tipo sofá como para tres o cuatro personas, y todo con alfombras lindísimas. El tema del escenario cambia según el casamiento, el que estaba instalado en el salón tenía un pavo real gigante con una cola de unos cinco o seis metros de largo que caía a un costado del escenario (la cola hecha totalmente con plumas de pavo real de verdad, nada de cosas artificiales). Igual el tema de la boda a la que voy es secreto así que me enteraré en el momento que llegue.



Hace un par de días, mientras caminaba por la calle, pasé por al lado de una boda. Una cosa muy rara. Al edificio donde se ve que vivía la novia o el novio lo decoraron todo con luces desde el techo hasta la planta baja. En la calle, en la puerta del edificio, había gente tocando tambores y cantando y bailando y a un costado se veía llegar al novio montado en un caballo blanco y tapándose del sol con una sombrilla toda decorada. Por supuesto, había fuegos artificiales por todos lados y toda la gente de la calle se unía al baile mientras iba progresando en dirección al salón donde se realizaría la fiesta. Asif dice que él también va a tener que entrar en un caballo y está un poco nervioso al respecto.




Hablando de nerviosismo, mi amigo también está nervioso por el casamiento. Resulta que no ve a la futura esposa desde hace cinco o seis años y cuando la vio, solamente fue en alguna reunión familiar por un tiempo corto y seguramente no pudo hablar mucho tampoco. La que va a ser su esposa es prima hermana de él y vive en Arabia Saudita, así que va a llegar un par de días antes de la boda; así es casarse con alguien que uno no conoce nada... algo bastante raro para mí. Igual, cuando le pregunté a mi amigo cómo funciona eso de casarse con alguien que ni siquiera se conoce, la respuesta que me dio fue que la esposa es como una mascota, un perro o un gato (una comparación no muy feliz pero bastante ilustrativa). Cuando uno la trae a la casa, la mascota puede porderlo a uno o arañarlo, pero con el tiempo uno se va encariñando y eventualmente se convierte en el mejor amigo de uno... igual con la esposa... quizás al principio ni se conocen y no se llevan muy bien, y con el tiempo la cosa va cambiando... son costumbres. Una cosa es cierto: una vez que se casan, el compromiso que se tienen los cónyuges es tan grande que ni siquiera piensan en que les va a ir mal, ya que se piensa que el matrimonio va a durar hasta que alguno se muera. La gran ventaja es que a pesar de que uno se casa así con otra persona elegida por la familia (impuesta, si se quiere) el riesgo de separación o divorcio no existe, la familia permanece unida y aparentemente son felices así.

La organización familiar es bastante clara: la mujer se ocupa de cuidar a los hijos, de cocinar y de acompañar al marido en lo que haga falta. El hombre, por otro lado, tiene que trabajar (las mujeres pueden trabajar también, pero quizás no la misma cantidad de horas), se hace cargo de los negocios, tiene que acompañar a la mujer cuando sale de la casa (cuando no es a hacer las compras) y demás tareas consideradas masculinas. No es que la mujer está sometida, no, nada de eso. Así es la cultura. Por lo tanto las mujeres ya asumen que su rol es, por ejemplo, cocinar. Si el marido está leyendo el diario, la mujer se va a ocupar de prepararle té, café, algo de comer, sin importar qué hora sea. Pero ellas están contentas así, es su rol y así lo asumen. El hombre, por otro lado, no piensa en cocinar, para seguir con el mismo ejemplo, pero no es porque sea fresco, simplemente es porque no es su rol, y así está bien. Más allá de las diferencias culturales, lo que sí me gustaría recalcar es que dentro del desorden, el tema social está bastante claro u organizado.

Al igual que la familia, la sociedad está organizada en castas y cada uno tiene asumido en qué casta se encuentra. No se mezclan, pero se respetan. Hoy fui una mezquita a acompañar a mis amigos a la ceremonia de los viernes y a la salida vi algo que no había visto en mi vida. ¿Que en Argentina hay gente pobre? ¿Qué está lleno de mendigos por todos lados? Entonces no han visto nada. A la salida de la mezquita había cientos de mendigos sin brazos, sin piernas, pidiendo dinero. A medida que iba saliendo, me agarraban del brazo o la pierna mientras me pedían que les diera alguna moneda. Pero nadie me obligaba a darles nada, uno puede seguir su camino como si nada... igual da un poco de impresión que una mujer sin pierna me agarre de la manga para pedirme que le dé una moneda. Y el shock es aún mayor si uno piensa que en esta ciudad viven las estrellas de Bollywood, el Hollywood de Oriente, y más grande todavía. Los actores de acá son famosísimos, ganan millones por publicidad, videos, películas y lo más impresionante es que en occidente no se conocen tanto. Solamente Aishwyara Rai que ganó un Miss Universo hace unos quince años, pero el resto no. Pero acá, todos estos actores y actricen son más famosos que por ejemplo Brad Pitt. Es increíble la plata que mueve la industria de Bollywood en este país.



Bueno, voy cerrando por ahora. Espero que vayan haciéndose una idea de cómo son las cosas por acá. Cualquier pregunta, me hacen y voy a tratar de responderla de la mejor manera posible. Gracias por leer hasta el final y hasta la próxima.